Cuando usted escuche detenidamente este disco estoy segura que podrá hacer una valoración a cerca de la verdadera música tradicional Cubana y el buen gusto de estos músicos al interpretarla. No se me hace difícil contarles a cerca de ellos, porque a pesar de tener una gran histo­ ria, son gente sencilla y muy hospitalaria. Cuando se trata con Félix Valera Miranda, gran conocedor de los secretos de la vida y representación viva de una singular familia que es centenaria y cultivadora de una genuina tra­ dición, podrá ver a través de sus ojos el amor y la dedicación a su obra, el respeto a su trabajo y la tenacidad ante la vida.

Ha sido a través de los años maestro de generaciones que hoy en día le agradecen su perseve­ rancia y es que para él, no hay nada que le de mas placer que enseñar. Félix desciende de una familia humilde de procedencia y arraigado sentir patriótico, es por eso que se enorgullece al contar su historia y dice que es "de un lugar de Oriente, donde está la cuenca del río Cauto, allá por Tunas, Bayamo y Manzanillo" y que en su estirpe se mezclan razas y des­ cendencias, por lo que hay un evidente mestizaje, lo que trajo consigo la conjugación de lo hispánico y lo africano transmitido a través de sus ante­ riores generaciones. De su abuela paterna: Julia y de sus tíos abuelos
Valera, aprendió cantos sincréticos, a "sonear" y tocar el tres; también el
manejo de la "tumbandera" e importantes formas utilizadas en la compo­sición.

De su madre Emilia, " Milla" como cariñosamente le llama, recibió las profundas tradiciones de su legendaria familia, legadas por los más ancianos como Cutiño,
el bisabuelo mambí con dotes de cantor y poeta popular y la bisabuela Catalina Basulto, que "también cantaba como un sinsonte", ellos y muchos otros, tanto de los Valera como de los Miranda forman parte de su acervo cultural basado en profundas concepciones y preceptos que hacen que hoy en día sus propios hijos hayan heredado ésa sabiduría tradicional y conozcan los secretos de esa manera tan peculiar de tocar.

Félix Valera Miranda, junto a su esposa Carmen y sus tres hijos (Enrique, Raúl y Ernesto) en el año 1985 funda oficialmente el sexteto "La Familia Valera Miranda" al cual le integra una voz segunda y claves (Radamés) que también toca el cuatro en parte del repertorio de la agru­pación y que fue compañero de estudios de Félix, lo que hizo que estuvie­ra muy ligado afectivamente a este colectivo familiar y se impregnara de su estilo e historia.

Con el decursar de los años, como es lógico, la agrupa­ ción ha evolucionado positivamente y ello ha conllevado a la integración de otro músico (Wilfredo, el tumbador) ex-compañero de estudios de "los dos mayores" (Enrique y Raúl) y que aún el maestro lo cuenta como su alum­no. Ahora "La Familia" es un Septeto Típico Tradicional que se empeña a pesar de la virtuosidad y complejidad interpretativa de sus músicos, en pre­servar y semejarse a la sonoridad de las agrupaciones de los años veinte; esto los hace trascender fuera del marco familiar y los lleva a ser objetivo de interés de instituciones investigadoras y un público diverso.

Como podrá apreciar, en este disco, han escogido un repertorio poco usual de una gama de autores reconocidos mundialmente: Lorenzo Hierrezuelo, Eduardo Saborit, Simón Díaz, Mercedes Pedroso, entre otros, para ser interpretados con su propio estilo y así poder honrar la obra de estos maestros, los textos han sido cuidadosamente rebuscados por su contenido sugerente y evidente sencillez, característica principal de la forma de decir del cubano, para que usted pueda comprender y disfru­tar el por qué se dice que "Son Así"